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la complejidad para su abordaje. También de salud no han sido actores relevantes en “Hay que lograr
que la perspectiva de derechos no es solo las reformas del sector, como sí lo han sido una mejor
una normativa jurídica sino un paradigma fuerzas corporativas, empresariales y políti-
de sociedad deseable que debe atravesar cas. Hay que pensar modos de potenciar la articulación de
todas las prácticas. Por poner un ejemplo, participación de nuevos actores.
en los conglomerados urbanos se percibe las provincias
un incremento de fricciones y violencias, –Y en ese sentido ¿cuál es el entre sí y con los
ligadas en muchos casos a segregaciones, desafío de los servicios estatales?
estigmatizaciones o falta de reconocimien- –El de articular virtuosamente lo nacional municipios, y de
to del otro como sujeto con derechos simi- con lo provincial y municipal en un siste- las provincias
lares, ya sea por género, condición social, ma federal. Hay que lograr una mejor ar-
u otras diversidades. Hay una tendencia ticulación de las provincias entre sí y con con Nación, en
rápida a colocar a personas en el lugar, los municipios, y de las provincias con Na-
como diría Judith Butler, de “vidas que no ción, en colaboración y adaptándose a las colaboración y
merecen ser lloradas”. Muchos medios de características y necesidades regionales. adaptándose a las
comunicación atizan esta direccionalidad Lo estatal, tal como lo mostró la pandemia,
del enojo y el malestar, por la vía de profun- debe tener una función central en la recto- características
dizar culpabilizaciones y demandar lo que ría y regulación del sistema, a los fines de y necesidades
llamo el “goce retaliativo”, una cierta satis- su integración. Un sistema de salud frag-
facción en la venganza. Las personas con mentado redunda también en modelos de regionales”
sufrimiento psíquico han sido algunos de atención que no integran, sino que frag-
los grupos tomados como referencia y esto mentan los problemas, desfavoreciendo
ha dado pié a una serie de ataques contra la la articulación intersectorial y el trabajo
Ley Nacional de Salud Mental, algunos de interdisciplinario. Lo que se necesitan son
ellos fundamentados directamente en afir- prácticas políticas y modelos de asistencia
maciones falsas, como que la Ley prohíbe en salud que sean integrales, que contem-
internar involuntariamente y tratando de plen la dimensión del sufrimiento psíqui-
reflotar la idea de “peligrosidad”. co, biológico y social. En lo que respecta a
salud mental el desafío es doble, porque a
–¿Qué desafíos impone un su vez necesita integrarse al sistema de sa-
sistema de salud fragmentado? lud y su fragmentación lo dificulta. Pero a
– La idea de su integración ha rondado al- su vez, salud mental se potenció por la par-
gunas propuestas históricas de distinta ticipación de nuevos actores como los or-
manera y en distintos momentos, pero nin- ganismos y movimientos de derechos hu-
guna logró sus objetivos. Cada una de esas manos, y las organizaciones de familiares
propuestas encontró resistencia en actores y usuarios. Es un movimiento social que ha
del sistema que, de una manera u otra, han estado a la altura de los acontecimientos
crecido y se benefician al amparo de esa cuando impidió que se modificara el de-
fragmentación. Algunos autores han habla- creto reglamentario de la Ley Nacional de
do de puja o pacto corporativos. El principal Salud Mental, en 2017. Quizás se necesita
desafío de un sistema de salud fragmentado ese modelo para el sistema, así como el Mo-
para lograr su integración no es técnico sino vimiento de Saúde Colectiva logró instalar
político y técnico. Por ejemplo, los usuarios la salud como derecho en la nueva Consti-
y los trabajadores asalariados del sistema tución de Brasil en 1988.
22 Revista ISALUD
VOLUMEN 17—NÚMERO 83—JULIO 2022