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llegada a la comunidad, incluso a sectores aislados. ria, los convenios intersectoriales y las campañas pú‑
Esto permite llevar a cabo estrategias de atención blicas de difusión. Porque de nada sirve tener recur‑
primaria, tales como información, concientización sos especializados si la comunidad no los conoce y no
y detección precoz. sabe dónde consultar.
– – Asimismo, los equipos de salud comienzan a ser A niveles más operativos, se pueden subrayar dos
conscientes de la necesidad de la articulación con conjuntos de factores: los institucionales y los relacio‑
otros sectores institucionales. nados con los equipos profesionales.
Con relación a los factores institucionales, el res‑
Sin embargo, no se puede desconocer que, además de paldo de las autoridades es esencial para la imple‑
las ventajas, existen obstáculos de distinto tipo, que mentación de protocolos, registros sistemáticos y
restan eficacia a la intervención del sector o muestran flujogramas; la conformación de equipos o referentes
la dificultad de traducir en políticas sensibilizados y capacitados; la dis‑
de salud los principios que las leyes Las mejores herramientas ponibilidad de insumos y la llegada
establecen: a la comunidad.
– – Desconocimiento de los proto‑ que tienen los Por parte de los equipos profe‑
colos sionales, es importante revalorizar
– – Falencias en la implementación profesionales de la salud el espacio de confianza de la con‑
de los protocolos existentes. sulta y la relevancia de la palabra
– – Interpretaciones dispares del frente a estas situaciones profesional. Cada entrevista puede
marco legal. constituirse en una oportunidad
– – Problemas en la disponibilidad son sus conocimientos privilegiada para prevenir y detec‑
de insumos. tar de forma temprana situaciones
– – Dificultades para la implemen‑ y experiencia, el de violencia.
tación de registros. Además de los protocolos, cuan‑
– – Falta de capacitación y/o de com‑ intercambio con colegas do existen, las mejores herramien‑
promiso de algunos profesionales. tas que tienen los profesionales de
– – Desconocimiento de la perspec‑ y, sobre todo, no desoír la salud frente a estas situaciones
tiva de las víctimas. son sus conocimientos y experien‑
– – Objeciones de conciencia y otras las sospechas, una vez cia, el intercambio con colegas y,
trabas ideológicas más sutiles. que se ha comprendido sobre todo, no desoír las sospechas,
Abordaje desde el una vez que se ha comprendido que
algunos de los signos o complica‑
sistema de salud que algunos de los signos ciones que aparecen en la consul‑
Para cumplir el rol estratégico que ta, pueden estar relacionados con
tiene el sistema de salud, tiene que o complicaciones que la violencia. Junto a esta actitud de
construir las estrategias e instru‑ alerta, también el convencimiento
mentos que garanticen respuestas aparecen en la consulta de que su intervención no es intru‑
adecuadas a todas y cada una de siva, sino legítima e, incluso, que
las modalidades de la violencia sexual. Por otra parte, puede llegar a ser crucial, no en el sentido de lograr re‑
además del rol profesional –de las distintas discipli‑ sultados plenamente satisfactorios e inmediatos, pero
nas– está la responsabilidad de los niveles decisorios, sí en el sentido de marcar una inflexión favorable, de
de los que depende la jerarquización de los progra‑ contribuir a poner palabras, datos útiles y contención,
mas especializados, la elaboración y/o la difusión de allí donde tal vez, por mucho tiempo, sólo ha habido
protocolos e instructivos, la asignación presupuesta‑ temor, desinformación y silencio.
Revista ISALUD 41
VOLUMEN 17—NÚMERO 81—MARZO 2022